YO, EL GUERRERO QUE TE AMA

Yo , un guerrero del amor

aseguro que existe,

lo he visto en sus ojos que son más profundos que el mar,

aunque su corazón no este ahora cerca al mio, el en mi siempre estará.

yo me modifico ante su imagen aunque no lo tenga planeado, 

yo abrazo a su ser, como al  tesoro más preciado, 

yo me envuelvo entre sus piernas todas,

entre su espalda toda,

entre sus besos todos, 

entre su sexo 

fuente de mi más grande placer,

yo dibujo y desdibujo sus suaves curvas con mis dedos, 

yo lo recorro con mi lengua entero,

dulce danzante esclava de sus deseos, 

yo desordeno sus misterios, 

yo decididamente me he apoderado de él. 

Yo, un apasionado aprendiz, 

trato de grabarme cada detalle, 

cada mirada, 

cada código, 

cada acertijo, 

cada silencio, 

cada suspiro, 

cada sonrisa, 

cada lagrima, 

cada secreto. 

Yo, un eterno enamorado de sus encantos, 

canto al cielo mío sus enfados, 

míos sus deseos , 

míos sus enredos ,

míos sus misterios, 

suyos mis reclamos, 

mío su amor ,

mío sus desvelos,

míos solo míos, 

me quedo agazapado,

prendido entre sus sueños,

lo veo dormirse, lo veo dormido, lo beso , lo acaricio, lo despeino, lo sacudo, lo desvelo. 

Yo, un apasionado arquitecto de ilusiones,  

escalo sus muros, trepo sus cabellos, beso sus rendijas mías, beso sus ojitos negros,

beso su boquita suave, roso con ternura el viento, el viento que nos envuelve, que nos conecta, que nos separa, 

yo desciendo paso a paso por sus miedos,

yo danzo en su patio de recuerdos,

yo espanto los fantasmas, 

yo calmo sus infiernos, 

yo  ofrendaría mi alma por salvarlo, renunciaría mil veces a ella de ser necesario,

tumbaría los muros que nos separan,

derribaría la puerta que me niega su morada,

destruiría la maldad que lo acechara, 

lo amaría y después...mas lo amaría,

pero no lo puedo amar mañana, 

solo se amarlo en el hoy,

en el crepúsculo y en el ocaso,

hasta que mis ojos perezcan,

para dar paso a otra madrugada 

y así a un nuevo día,

donde le declare mi amor 

y lo enamore como la primera vez,

el me rosaría las manos,

mientras me abandono a su paz

que me resguarda,

que me cobija, 

que me sustenta,

que me repara,

y viviría en su hoy…

que es mi única eternidad.